Cómo lucir un cabello sano y brillante
Nuestro cabello es uno de los elementos que mejor definen nuestra personalidad. Y, por eso mismo, es importante cuidarlo con productos naturales que no alteren sus propiedades, aunque también es muy importante tener presente que nuestra dieta y la gestión del estrés son fundamentales para conseguir un cuero cabelludo sano y un pelo fuerte y brillante.
Muchos de los productos de la cosmética convencional utilizan sulfatos fuertes o siliconas que dan una apariencia de cuidado pero que, en realidad, destruyen la barrera hidrolipídica del cuero cabelludo. Además, la aplicación de tintes sintéticos, los moldeados, permanentes y el uso continuado del secador o la plancha destruyen la fibra capilar.
Y, además, con la llegada del verano, nuestro cabello se resiente por el sol, el cloro de las piscinas o el calor.
Desde Atenea te damos algunos consejos para lucir un cabello sano y brillante:
1. Cortar: un buen corte de pelo es fundamental para sanear las partes dañadas pues permitiremos que la fibra capilar se regenere más fácilmente.
2. Evitar el exceso de calor. Siempre que sea posible, lo más aconsejable es huir del secador y la plancha y contar un cepillo adecuado.
3. Evitar productos de fijación muy agresivos, tales como lacas, espumas, gominas o geles convencionales que resecan mucho el pelo.
4. Lavar con champús con tensioactivos suaves, sin sulfatos ni siliconas.
La gama de champús Khadi disponible en Atenea cuenta con productos para dar solución a todos los tipos de cabello:
- Cabello seco, sin brillo y con tendencia al encrespamiento. Para este tipo de cabello recomendamos el champú de Rosas, con flores de rosa, hibisco y extracto de regaliz que previenen la deshidratación excesiva del cabello. Además de la proteína de trigo hidrolizada, esta fórmula cuenta con proteína de almendra hidrolizada, acondicionadores que ayudan a reparar el cabello quebradizo y seco.
- Cabello graso. Champú de Nutgrass. Entre otros ingredientes, contiene Juncia real (Cyperus Rotundus), cúrcuma y aceites esenciales de naranja, limón o mandarina, que regulan la secreción de sebo, son antisépticos y astrigentes.
- Cabello con caspa y cuero cabelludo irritado. El champú de Neem contiene Neem y aceites esenciales de árbol de té, romero y eucalipto que ayudan a equilibrar la secreción de sebo, previenen inflamaciones producidas por infecciones de bacterias y hongos que suelen producir caspa, picor, escamas, rojez e incluso caída de cabello excesiva.
- Cabello con cuero cabelludo sensible. El champú de Hibisco contiene aceite esencial de lavanda, extracto de hibisco, Anantmool, Kino indio y Ratanjyo, que reducen la inflamación, equilibran el sebo y previenen la descamación.
- Cabello sin brillo. El champú de Amla proporciona un cabello suelto y con volumen.